Reseña: El nombre del viento

Con el bombo que le están dando a este libro ya estaba tardando en leérmelo, pero es lo que toca cuando a tu hermana no le da la gana acabárselo y además te pones con otro libro casi igual de gordo. En fin, ahí va la sinopsis:

“He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y escrito canciones que hacen llorar a los bardos.

Me llamo Kvothe. Quizás hayas oído hablar de mi.”

Esto es lo que podemos leer si miramos la contraportada del libro, y a mí, solo con este párrafo, ya me entraron unas ganas locas de tenerlo. El caso es que en realidad, de lo que se dice en  este fragmento tan tentador no ocurre prácticamente nada (vamos, nada, sólo se dan indicios), pero bueno, aunque eso le quite parte del encanto, no por ello hay que dejarlo de lado. Yo iba con un poco de prejuicio, porque a mi hermana le estaba costando acabárselo, decía que era muy lento, y yo suelo fiarme de su opinión porque nos gustan los mismos tipos de libros. Eso de estar acostumbradas a novelas de ritmo frenético no es bueno XD.

-Aún así me lo empecé la semana pasada, a pesar de estar con exámenes, y me lo he terminado hoy, tras tomarme ayer un día medio sabático y leerme 400 páginas de golpe. Y aunque es verdad que la acción es bastante pausada, no se me ha hecho nada pesado, se lee muy bien. Quizás le cueste arrancar un poco los primeros capítulos, hasta que ubica la historia, pero a partir de ahí se hace más llevadero.  La narración es buenísima, y hace unas descripciones del entorno, sobre todo de los bosques y la música, preciosas. Yo he echado de menos algo de acción, pero parece que en las dos siguientes entregas me voy a hartar de aventura, así que se lo perdono.

-En cuanto a los personajes, se deja muy claro quién es el protagonista, Kvothe. No me ha parecido un personaje cliché para nada, el punto pícaro que tiene le da mucho encanto, y permite perdonarle los venazos de prepotente que le salen a veces. Porque eso sí, el tío es un crack y lo sabe, así que puede presumir. La verdad es que tiene puntos muy buenos, sobre todo cuando le sale la vena vacilona, porque otra cosa no será, pero la labia le sale por los cuatro costados.
La evolución del personaje durante las distintas etapas de su vida que aparecen en el primer libro es grande, y se va perfilando un poco en lo que va a convertirse, porque aunque se le vaya a considerar un héroe, Kvothe también tiene un pasado algo oscurillo. Sin embargo, hay partes en las que de verdad dan ganas de darle un abrazo al pobre, que aunque sea listo sigue siendo un niño.

El resto de personajes quedan bastante menos perfilados que el protagonista, a excepción de Abenthy, el mentor de Kvothe, el que le encauza un poco en el camino. 

-Como no podía faltar, también tenemos una chica,Denna, un poco rara, todo hay que decirlo ,por lo que seguramente sus rarezas las explicarán más adelante. Lo de los amores platónicos no me van mucho, a mí me gusta ver más la evolución, pero bueno, el caso es que aquí el muchacho se nos queda prácticamente prendado, y parece ser que no es el único.

En resúmen: el libro me ha gustado bastante, tiene partes algo más pesadas, pero en general no resulta una lectura pesada. Está entretenido y deja con ganas de más, por lo que espero conseguir "El temor de un hombre sabio" pronto y quitarme la incertidumbre de ver lo que va a pasar. ¡RECOMENDADO!

PD: Me gusta más otra de las portadas que han sacado